Día de la ICE 2020: ¿Cuál será el futuro de la Iniciativa Ciudadana Europea?

Día de la ICE 2020: ¿Cuál será el futuro de la Iniciativa Ciudadana Europea?

El 25 de febrero de 2020 se celebró la 9.ª edición del Día de la ICE: Los organizadores de ICE, los ciudadanos, las organizaciones de la sociedad civil, los investigadores y los responsables políticos se reunieron para debatir el pasado presente y el futuro de la Iniciativa Ciudadana Europea, menos de dos meses después de la entrada en vigor del nuevo Reglamento. No solo hubo un debate fundamental sobre los méritos y las limitaciones del instrumento, sino que los participantes también debatieron y votaron una serie de recomendaciones para mejorar este instrumento. ¡Más información!

El Día de la ICE es la reunión anual de organizadores de ICE, ciudadanos, organizaciones de la sociedad civil, investigadores y responsables políticos para intercambiar, conectar y reconectar en torno a la cuestión de interés común: el futuro de la Iniciativa Ciudadana Europea, el primer y único instrumento de participación transnacional del mundo. El Día de la ICE 2020 fue organizado por el Comité Económico y Social Europeo en colaboración con Democracy International, el Servicio Europeo de Acción Ciudadana (ECAS), el Comité Europeo de las Regiones, la campaña ICE y Bertelsmann Stiftung. El acto tuvo lugar menos de dos meses después de la entrada en vigor, el 1 de enero de 2020, del nuevo Reglamento sobre la Iniciativa Ciudadana Europea.

Crédito de imagen «@EU2020 – fuente: CESE»

La primera parte del acto permitió a los participantes extraer lecciones de su experiencia con la ICE hasta hoy. Además, el objetivo era que los ciudadanos compartieran y debatieran sus esperanzas y expectativas para el futuro del instrumento en el marco del nuevo Reglamento y más allá. Desde el principio, una gran mayoría de los participantes declaró que el nuevo Reglamento es una mejora con respecto al Reglamento original. No obstante, los discursos e intercambios que siguieron mostraron: la ICE puede y debe hacer mejor.

Un punto central de debate fue la cuestión del «éxito»: ¿qué hace que una ICE tenga éxito? Pablo Sánchez, organizador de la primera ICE de éxito «Right2Water», reflexionó al respecto: «El éxito no debe ser definido por la Comisión — debe ser definido por los organizadores». En su discurso, Olga Kikou, representante de la ICE «End The Cage Age», expresó lo que considera «éxito»: «Si conseguimos sacar a los animales de las jaulas, la ICE habría merecido todo el esfuerzo». La ICE «End the Cage Age» también ha logrado alcanzar el umbral de firma, pero aún está a la espera del procedimiento de examen.

Tras la expresión del descontento con el seguimiento de iniciativas exitosas, tuvo lugar un debate más general sobre cómo mejorar el impacto de este instrumento. Algunos de los participantes alegaron que el principal problema es el hecho de que la ICE se aborda en la Comisión Europea: «Mientras la [ICE] permanezca en manos de la Comisión, desgraciadamente no aportará ningún éxito real». Para cambiar esta situación, se han presentado propuestas para que el Parlamento Europeo participe en mayor medida: celebrar debates y votaciones plenarias sobre todas las iniciativas que hayan prosperado. Además, los participantes y oradores alegaron que un posible futuro derecho de iniciativa del Parlamento debería compartirse con los ciudadanos a través de la ICE. Además del papel del Parlamento Europeo, también se llamó la atención sobre el papel de los Estados miembros y sus Parlamentos. Assya Kavrakova, directora de ECAS, animó a los Parlamentos nacionales a celebrar debates sobre las iniciativas en curso incluso antes de alcanzar el umbral de firma. Por último, Daniela Vancic, directora de programas europeos para la democracia internacional, sentó las bases para que la ICE se convirtiera en un instrumento de democracia directa y no participativa. Argumenta que, en el futuro, los organizadores que tengan éxito deberían poder iniciar una segunda ronda de recogida de firmas si no están satisfechos con la respuesta a su iniciativa de las instituciones de la UE. Si también tuvieran éxito en esta segunda ronda de recogida de firmas, habría que organizar un referéndum vinculante a escala de la UE. La propuesta de reforma de Daniela contó con el apoyo de más del 60 % de los participantes en el Día de la ICE, pero para su aplicación sería necesario modificar el Tratado.

Crédito de imagen «@EU2020 – fuente: CESE»

Otro reto que se debatió es la falta de visibilidad del instrumento. La campaña de comunicación de la Comisión sobre la ICE fue acogida con satisfacción y considerada necesaria, pero insuficiente: Carsten Berg, director de la Campaña ICE, afirmó que la ICE solo se conocerá mucho más cuando haya una verdadera historia de éxito, una vez que los ciudadanos observen el impacto que este instrumento puede tener en la política y la elaboración de políticas de la UE.

A lo largo de la sesión de la mañana se abordaron muchas más cuestiones: la oportunidad que brinda la ICE para implicar a los jóvenes en el proceso político, en particular si la edad mínima para firmar una ICE debía reducirse a los 16 años en todos los países de la UE; las diferencias en las culturas políticas y las historias nacionales en toda la UE, lo que explica por qué es más fácil convencer a los ciudadanos de que firmen una ICE en algunas partes de la UE y no en otras; y la oportunidad que ofrece la Conferencia sobre el Futuro de Europa, de dos años de duración, para que la ICE sea más pública.

Si bien muchos de los debates sobre los retos a los que se enfrenta el instrumento no son nuevos, la única manera de que la ICE tenga una oportunidad de resurgir es si las personas siguen preocupadas por su destino. En cualquier caso, esta edición del Día de la ICE demostró que sigue habiendo una comunidad de personas que se ocupa de la ICE y que sigue creciendo.

Si está interesado en leer las recomendaciones del Día de la ICE de 2020 para el futuro de la ICE, formuladas sobre la base de la contribución del orador y votadas por los participantes, consulte aquí.