Las redes de pesca desechadas (también conocidas como redes fantasma) y el equipo de pesca son un contribuyente sustancial a la contaminación de los océanos. Algunos estudios e informes sugieren que son el mayor contribuyente de desechos en los océanos.
«Más de las tres cuartas partes de la masa de la GPGP fue transportada por escombros de más de 5 cm y al menos el 46 % estaba compuesta por redes de pesca». https://www.nature.com/articles/s41598-018-22939-w
A medida que requerimos más zonas de no pesca para repoblar los peces en nuestros océanos, necesitamos un sistema de verificación para las redes y los aparejos de pesca que se descartan o se pierden en los océanos.
Dado que las redes y los artes de pesca son fáciles de desechar en el mar sin que nadie se dé cuenta, debe aplicarse una multa. Las redes podrían recibir un identificador único para controlar su estado (etiqueta RFID adjunta al equipo que puede escanearse fácilmente y verificarse digitalmente). Las empresas pesqueras están obligadas a hacer informes periódicos sobre la pérdida y eliminación de sus redes de pesca y si sus artes se pierden en el océano, tienen que pagar una multa considerable.
El proyecto piloto «NetTag», que rastrea las redes de pesca con etiquetas de transpondedor acústico, está financiado por la UE y se acerca a su finalización en junio de 2021 (https://cinea.ec.europa.eu/featured-projects/nettag_en).
Una vez finalizado con éxito, el sistema debe aplicarse en toda la UE.
Las opiniones expresadas en el Foro de la ICE reflejan exclusivamente el punto de vista de sus autores y no puede considerarse que reflejen, en modo alguno, la posición de la Comisión Europea o de la Unión Europea.

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